La Asociación Andaluza de Empresas Fabricantes de Carrocerías y Remolques para Vehículos Industriales y de Empresas Fabricantes de Remolques Agrícolas, ANFACAR, integrada en la Federación de Empresarios del Metal, FEDEME, ha incorporado como asociados a lo largo de los últimos meses a varios de los principales fabricantes de remolques agrícolas más importantes de Andalucía,  ubicados en la provincias de Córdoba, Granada, Jaén, Málaga y Sevilla.

Entre los nuevos asociados están: Delgado Gamero S.L (Córdoba); Quintanagro (Málaga); Hnos. Troya Muñoz C.B (Granada); Fitoliva (Jaén); Osuna Sevillano S.L (Córdoba); Camposur (Jaén); G. Pérez Sánchez – Maquinaria Agrícola (Sevilla); M.A Gómez Redondo e Hijos S.L (Sevilla) y Agrimeca (Jaén).

Con su incorporación a ANFACAR estas empresas fabricantes buscan una mejor adaptación a los inminentes cambios normativos, así como defender los legítimos intereses empresariales del sector ante las diferentes administraciones competentes (Ministerio de Industria y Agricultura, Junta de Andalucía), servicios técnicos de homologación y reforma, fabricantes de proveedores de componentes, así como usuarios de estos vehículos  y la sociedad andaluza en general.

Actualmente el sector de la fabricación de remolques agrícolas y maquinaria agrícola, tanto en Andalucía como en toda España, vive bajo una gran incertidumbre por la aplicación de los nuevos requisitos de homologación derivados del Reglamento UE 167/2013.

Dentro de estos cambios normativos destaca principalmente la necesidad obligatoria, incluso para homologaciones de tipo nacional, de realizar ensayos de frenado con el consiguiente aumento de los costes de producción para estas empresas.

Los cambios normativos serían de aplicación para nuevas matriculaciones a partir del próximo 1 de enero de 2018, si bien se está a la espera de la publicación en BOE de un aplazamiento de estos requisitos hasta el 1 de enero de 2019. Igualmente es de destacar, que a pesar de la proximidad en la aplicación de estos cambios normativos, existe un gran desconocimiento generalizado en el sector,  tanto entre los propios fabricantes, clientes, proveedores de compontes o laboratorios e ingenierías de homologación de este tipo de vehículos, aspecto sobre el que se está trabajando intensamente desde ANFACAR.